Solicita la pensión para Personas Adultas Mayores

Con la pensión de jubilado, recibes directamente $3.850 MN cada dos meses. Aquí puede informarse sobre cómo solicitarlo.

Solicita la pensión para Personas Adultas Mayores
Solicita este beneficio económico de $1.925 MN mensuales

La Pensión para Ancianos es una ayuda económica de 1,925 millones de dólares al mes para ayudar a los ancianos mexicanos a vivir una vida feliz y plena en la vejez.

Este apoyo económico se otorga cada dos meses y está dirigido a todos los abuelos que viven en México. Por lo tanto, es de carácter universal y ha sido elevado a rango constitucional, obligando al Estado nación a proporcionar este apoyo económico independientemente del gobierno en cuestión.

La pensión para la tercera edad forma parte de los programas de asistencia social promovidos por el gobierno federal mexicano. Mediante este apoyo, se reconoce el derecho de las personas mayores a disfrutar de una vejez plena y digna en la que puedan disfrutar de salud, alimentación, educación, apoyo, acceso a servicios y participación.

El objetivo de este programa es mejorar la situación del grupo de población más numeroso del país y reconocer sus esfuerzos y su compromiso con la construcción del país.

¿Quién puede beneficiarse de esta ayuda? Todos los adultos mayores de 65 años que viven en México, independientemente de su origen, condición social o económica, ideología, fe, nacionalidad, etc.

Los extranjeros deben presentar una tarjeta de residencia permanente expedida por el Instituto Nacional de Migración (INM) con una fecha de expedición superior a 25 años, un certificado de migración expedido por el INM, una Clave Única de Registro de Población permanente y un justificante de domicilio.

Si el solicitante no puede realizar el trámite por sí mismo, puede designar a un adulto para que le represente. Esta persona es responsable de presentar un documento oficial de identidad, una CURP, un comprobante de domicilio y un documento que acredite el parentesco con el adulto mayor de acuerdo a lo establecido en el Formato Único de Asistencia Social.

Se da prioridad a las personas mayores que viven en comunidades y localidades con población predominantemente indígena o afromexicana o con un grado de marginación alto o muy alto.

¿Cuáles son los requisitos para recibir esta ayuda?

Todos las personas mayores de 65 años tiene derecho al acceso de este beneficio

Para poder acceder a esta ayuda económica deberás poder cumplir con los siguientes requisitos:

  • Tener 65 años o más de edad cumplidos dentro del bimestre de incorporación.
  • Residir dentro del territorio que comprende la República Mexicana.
  • Presentar el Acta de nacimiento.
  • Contar con un Documento de identificación vigente (Credencial para votar o del INAPAM, pasaporte u otros documentos expedidos por la autoridad correspondiente que acrediten identidad).
  • Brindar la Clave Única de Registro de Población (CURP).
  • Comprobante de domicilio (de máximo 6 meses de antigüedad) o constancia de residencia de la autoridad local.
  • Formato Único de Bienestar debidamente llenado.

¿Cuánto recibirás?

La pensión del Programa de Bienestar para personas mayores se concede mensualmente y asciende a 1,925 millones. Sin embargo, los pagos se realizan cada dos meses. Esto significa que cada dos meses recibirás $3,850 MN directamente o por tarjeta bancaria, sin intermediario.

¿Cómo solicitar la pensión para personas Adultas Mayores del programa de Bienestar?

Consulta el sitio Web de la Secretaría de Bienestar para conocer donde registrarte

Para inscribirse o inscribir a un adulto mayor al programa Bienestar y recibir este apoyo económico, es necesario consultar la página oficial del gobierno mexicano para conocer la ubicación, fecha y hora de su unidad.

También puede obtener esta información a través de la línea telefónica de Bienestar. Así que llame al número 800-639-42-64.

Si la persona que quiere presentar la solicitud tiene dificultades para rellenarla, un familiar o persona responsable puede solicitar una visita a domicilio del personal de la Secretaría de Bienestar Social. De este modo, podrá cumplimentar la solicitud de pensión sin tener que desplazarse a otras oficinas.

No obstante, la solicitud también puede presentarse en nombre de la persona mayor presentando los documentos necesarios.

¿Por qué se creó esta ayuda financiera?

Este beneficio forma parte del reconocimiento de los derechos de este sector de la población

Esta pensión forma parte del reconocimiento por parte del gobierno mexicano de los derechos de las personas mayores.

En la actualidad, las personas mayores se enfrentan a diversas dificultades relacionadas con la falta de oportunidades laborales, la escasa participación en actividades sociales y culturales y la exclusión permanente de la sociedad y la familia.

Sin embargo, son miembros de la sociedad y tienen derechos. Entre ellos figuran el derecho al reconocimiento, la salud, la nutrición, la integración familiar y social, el apoyo, la seguridad jurídica, el acceso a la participación y la autonomía.

Basándose en estos principios, México adoptó en 2002 la Ley de los Derechos de las Personas Mayores. Su principal objetivo es que las personas mayores de 60 años puedan jubilarse con dignidad.

¿Qué prevé la Ley de Derechos de las Personas Mayores?

Conoce de qué se ocupa la Ley y cuáles son sus criterios

De acuerdo con las disposiciones de la Carta de Derechos de las Personas Mayores, los principios que deben guiar las políticas dirigidas a este colectivo deben garantizar que:

  • Deben aplicarse de forma que garanticen la autonomía de las personas mayores. También deben tratar de reforzar su independencia, su capacidad de decisión y su desarrollo personal y comunitario;
  • buscar su participación e implicación en todos los ámbitos de la vida pública. Se les consultará y abordarán las cuestiones que les interesen; también se fomentará su presencia e intervención;
  • Hay que tener en cuenta la equidad. Esto significa que las condiciones de acceso a la asistencia social de las personas mayores se tratan de forma justa e igualitaria, sin distinción de sexo, situación económica, etnia, fenotipo, religión u otras circunstancias;
  • Responsabilidad compartida. Nos corresponde a todos informarnos sobre todo lo que implica la vejez para que las personas mayores sean tratadas con dignidad, sin discriminación ni exclusión. Esta responsabilidad es compartida por los sectores público y social, especialmente las comunidades y las familias.
  • Atención prioritaria. Esto obliga a las instituciones públicas a nivel federal, provincial y municipal, así como a los sectores social y privado, a poner en marcha programas adaptados a las diferentes etapas, características y circunstancias de las personas mayores.