El año 2024 trae consigo importantes cambios en las reglas que rigen la jubilación anticipada en nuestro país y que van a afectar en tu decisión si estabas pensando en tomarla.
El país ha experimentado un aumento gradual en la edad de jubilación en los últimos años, que alcanzará los 67 años en 2027. Este año, las modificaciones también afectarán las edades a partir de las cuales se puede acceder a la jubilación anticipada, tanto de forma voluntaria como involuntaria.
La jubilación anticipada voluntaria ofrece a los trabajadores la opción de retirarse hasta dos años antes de la edad legal ordinaria de jubilación. Por otro lado, la jubilación anticipada involuntaria o forzosa, que ocurre debido a eventos ajenos a la voluntad del trabajador, como despidos masivos (ERE), fallecimiento o jubilación del empleador, permite el retiro hasta cuatro años antes de la edad legal ordinaria.
En este año 2024, la edad legal ordinaria se incrementará en dos meses respecto al año anterior, ubicándose en 66 años y 6 meses para aquellos con menos de 38 años cotizados. No obstante, aquellos que cuenten con 38 años o más de cotizaciones podrán jubilarse a los 65 años. Estos ajustes buscan adaptar el sistema de pensiones a las demandas demográficas y económicas actuales.
Jubilación anticipada
A pesar de estos cambios, la jubilación anticipada sigue siendo una opción viable para los trabajadores, aunque ahora con consideraciones adicionales. La ley establece penalizaciones para la jubilación anticipada, tanto voluntaria como involuntaria, que oscilan entre el 21% y el 3,26%, dependiendo de si se adelanta entre 24 meses o un mes, respectivamente.
Para aquellos que buscan la jubilación anticipada voluntaria en 2024, será necesario haber cumplido los 64 años y 6 meses, en el caso de tener menos de 38 años de cotización, o a partir de los 63 años con 38 o más años de aportaciones a la Seguridad Social.
Además, acceder a la jubilación anticipada voluntaria requiere un período mínimo de cotización de 35 años, con al menos 2 años comprendidos en los 15 inmediatamente anteriores al retiro. Estos requisitos buscan asegurar que aquellos que optan por la jubilación anticipada hayan contribuido adecuadamente al sistema de pensiones a lo largo de su carrera laboral.
En el caso de la jubilación anticipada involuntaria, será posible acceder a ella cuando se produzca por causas no imputables al trabajador, hasta 4 años antes de la edad ordinaria. Esto implica empezar el retiro a partir de los 62 años y 6 meses si no se tienen 38 años cotizados, o a partir de los 61 años con 38 o más años de cotización.
Para la jubilación anticipada involuntaria, se requiere acreditar un período mínimo de cotización efectiva de 33 años, sin tener en cuenta la parte proporcional por pagas extraordinarias. También es necesario estar inscrito como demandante de empleo durante al menos 6 meses inmediatamente anteriores a la solicitud de jubilación.
En ambos casos, solo se computará el período de prestación del servicio militar obligatorio o de la prestación social sustitutoria, o del servicio social femenino obligatorio, con un límite máximo de un año.
¿Merece la pena la jubilación anticipada?
Estos cambios sustanciales en la jubilación anticipada en 2024 plantean nuevos retos y consideraciones para quienes se acercan a la etapa de retiro. La opción de jubilarse antes de la edad legal ordinaria sigue siendo viable, pero ahora con requisitos y penalizaciones que exigen una planificación más cuidadosa.
La clave radica en tomar decisiones informadas que equilibren el deseo de un retiro temprano con la seguridad financiera a lo largo de la jubilación. Evaluar la edad, los años de cotización y los impactos financieros a largo plazo se vuelve crucial en este proceso.
En este contexto cambiante, la jubilación anticipada se convierte en un proceso que demanda análisis, preparación y reflexión. Con la orientación adecuada, los trabajadores podrán navegar por estos cambios y tomar decisiones que favorezcan su bienestar financiero y su calidad de vida durante la jubilación.
