La vitamina D se encuentra en alimentos que incluimos en la dieta mediterránea habitualmente, como pueden ser los pescados grasos, el huevo o los lácteos. Según los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de Estados Unidos, la mayoría de las personas absorber la cantidad suficiente a través de la alimentación o el sol durante el verano. Sin embargo, en invierno disminuye nuestra exposición al sol ya que los días son más cortos y pasamos más tiempo en interiores.
Si quieres que tu cuerpo funcione de forma correcta, debes mantener estables los niveles de vitamina D en tu organismo. ¿Cómo puedes hacer esto?. La respuesta es muy sencilla: siguiendo una dieta equilibrada o tomando suplementos vitamínicos a diario. Ahora bien, para empezar a tomarlos es recomendable consultar con nutricionistas que nos aconsejen cuál es la cantidad que necesitamos para sentirnos bien.
En cualquier caso, también puede absorberse a través de la luz solar siempre que podamos pasar tiempo en exteriores. Si no es así, los suplementos de vitamina D se deben tomar en un momento concreto del día para evitar que nuestro cuerpo no la absorba correctamente.
Según la Dra. JoAnn Manson, profesora de medicina en la Escuela de Medicina de Harvard y jefa de la División de Medicina Preventiva del Hospital Brigham and Women’s de Boston, «es recomendable consumir estos suplementos junto con comidas» para que funcione mejor.
Cantidad recomendada de vitamina D en personas sanas
La ingesta de suplementos de vitamina D es un tema bastante recurrente en las investigaciones de expertos en nutrición. Y es que para muchos, todas las personas aportamos la cantidad suficiente al organismo de forma natural. Por ejemplo, tomando el sol en verano o consumiendo pescados grasos en invierno.
«La mayoría de nosotros -adultos sanos de entre 19 y 70 años- deberíamos intentar consumir entre 600 y 800 unidades internacionales (UI)», afirma Carol Haggans, portavoz de la Oficina de Suplementos Dietéticos de los NIH.
Sin embargo, algunas personas tienen problemas a la hora de absorber correctamente la vitamina D a través de la alimentación. Por ello, es necesario que se recomiende la ingesta de suplementos para evitar problemas derivador del déficit de este elemento en el organismo.
Por ejemplo, los suplementos de vitamina D pueden ser una opción interesante para personas con enfermedad de Crohn, la celiaquía o la colitis ulcerosa. O, en su caso, adultos mayores, cuyo organismo es menos capaz de producir vitamina D a partir de la exposición al sol a medida que envejecen.
¿Cuándo es mejor tomar suplementos?
Según la mayoría de investigaciones que se han desarrollado al respecto, obtener vitamina D de los alimentos es algo complicado. Según los datos obtenidos en distintos estudios, solo el 10-20% proviene de la dieta, mientras que el 80-90% se genera por exposición solar.
Por ello, los suplementos vitamínicos pueden ser una opción saludable en algunos casos. Según la Dra. JoAnn Manson, no importa el momento del día en el que incorporemos este tipo de productos a nuestra alimentación. Eso sí, es importante que siempre se haga en las comidas ya que será más fácil que el organismo absorba la cantidad adecuada.
Otros expertos han recomendado el consumo de vitamina D por la mañana. Un buen ejemplo de ello es el nutricionista clínico de NOW Foods, Neil Levin, que afirma que la mañana es el mejor momento del día para consumir vitaminas.
En cualquier caso, si necesitas tomar suplementos vitamínicos lo mejor es que lo hagas con comidas en el estómago. Y en el momento del día que notes los efectos positivos de incorporar esta rutina a tu dieta diaria.
