El problema de haber cotizado 15 años: adiós a la pensión de jubilación

No todo el mundo conoce el problema de haber cotizado 15 años. Cotizar el mínimo de 15 años permite acceder a la pensión contributiva de jubilación, pero esto puede traducirse en una pensión significativamente baja, incluso por debajo del mínimo establecido por la legislación. Es decir, una pensión que no te dará para vivir de manera digna. Este escenario plantea serias reflexiones sobre la sostenibilidad del bienestar durante la vejez para aquellos con períodos de cotización justos en el umbral mínimo.

La Seguridad Social determina la pensión de jubilación a través de un cálculo que considera las últimas bases de cotización y el total de años trabajados. Para obtener la base reguladora, se toman las 300 últimas bases de cotización (equivalentes a 25 años) y se divide el resultado entre 350, reflejando las 14 pagas anuales que recibe un pensionista. Este método favorece a quienes han cotizado por períodos más extensos, dejando en desventaja a quienes apenas cumplen con los 15 años mínimos requeridos.

El problema de haber cotizado 15 años: una pensión indigna.

Cotizar solo 15 años tiene dos consecuencias principales en la cuantía de la pensión.

  • Reducción de la base reguladora: Al dividir las bases de cotización entre un número mayor al de las contribuciones efectivas, la base reguladora resultante es más baja, lo que limita la pensión máxima alcanzable en comparación con aquellos que han cotizado 25 años o más.
  • Limitación al 50% de la base reguladora: La pensión se reduce aún más, ya que solo se tiene derecho al 50% de la base reguladora calculada, lo que resulta en una pensión considerablemente menor.

Por ejemplo, una cotización media de 1.800 euros durante 15 años resultaría en una base reguladora aproximada de 975,21 euros y, por ende, una pensión de alrededor de 487,60 euros, notablemente inferior a las expectativas de muchos trabajadores. Sí consideramos el aumento de los precios y servicios básicos. Una persona que viva con este sueldo al mes, no podrá tener una calidad de vida media. Mucho menos aún si de este sueldo dependen cónyuges o familiares cercanos.

Soluciones y complementos a considerar

Ante pensiones que no alcanzan el mínimo, existen mecanismos como el complemento a mínimos y la integración de lagunas para mejorar la cantidad recibida. El complemento a mínimos asegura una pensión que, al menos, alcance la cuantía mínima establecida, dependiendo de la situación familiar del pensionista al llegar a la edad reglamentaria. Sin embargo, este complemento está sujeto a requisitos de ingresos y no se consolida, necesitando revisión anual.

La integración de lagunas permite incorporar períodos no cotizados bajo ciertas condiciones, mejorando ligeramente la base de cálculo de la pensión para aquellos con historiales laborales discontinuos o con cotizaciones por debajo del mínimo debido a contratos a tiempo parcial.

La realidad de quienes han cotizado únicamente el mínimo requerido de 15 años es un llamado de atención sobre la necesidad de planificar cuidadosamente la jubilación y explorar todas las opciones disponibles para mejorar la pensión. Es crucial para los trabajadores estar informados sobre cómo sus años de cotización afectan su futura pensión y tomar medidas proactivas para asegurar una vejez digna y económicamente estable.


Quizás te interese: